En una anterior entrega de nuestro blog ya comentábamos los consejos para guardar y conservar correctamente el vino en casa, donde al final de la entrada hacíamos mención de la recomendación de consumir cada vino dentro de su tiempo máximo recomendado de consumo, puesto que no todos los vinos se pueden almacenar por un largo tiempo o indeterminado.
Existen ciertas personas que creen que cuanto más se guarde un vino mayor será su maduración y por tanto mejor estará y más se disfrutará en ese futuro evento que todos queremos tener, que será el ideal para abrir una de esas caras botellas que mantienen en sus bodegas. Pero esto no es así, y cada tipo de vino tiene tu tiempo máximo de maduración, tras el cual empezará a mermar su calidad.
Son muchas las variedades de vinos y por tanto sería muy extenso tratar uno por uno, pero si podemos dar unos tiempos aproximados de consumo dentro de los principales tipos de vino.
Vino Rosado
Es el vino que ha de beberse antes, es recomendable que se consuma durante el año siguiente a su embotellado, aunque ciertos rosados pueden aguantar hasta los 2 años.
Vino Blanco
Este vino disfruta de algo más de vida que los rosados y menos que los tintos. Lógicamente dependerá de si es un vino joven o si ha disfrutado de crianza en barrica así como de la calidad del mismo. Un vino blanco joven es recomendable beberlo en el año o año y medio siguiente a su embotellado, pudiera extender su vida hasta los 2 años. Si el vino ha disfrutado de crianza en barrica su tiempo máximo de maduración puede alcanzar desde los 3 a los 5 años.
Vino Tinto
Dentro del vino tinto tenemos que distinguir entre vino joven, crianza, reserva y gran reserva.
El vino tinto joven disfruta de un tiempo máximo de consumo recomendado de 2 años.
El vino tinto crianza puede extender su maduración entre los 2 y 5 años tras su embotellado.
El vino tinto reserva puede disfrutar de unos tiempos de guarda comprendidos entre los 6 y 10 años.
El vino tinto gran reserva es el que mayor tiempo de maduración puede alcanzar, si bien la media pudiera estar en los 15 años hay grandes reservas con gran calidad que pueden llegar a aguantar óptimos durante décadas.
¿Y qué pasa con los espumosos, cavas y champagne?
Son vinos que con el paso del tiempo van perdiendo gas carbónico, se recomienda consumirlos en el año y pueden llegar a aguantar en óptimas condiciones hasta 2 años.
Os añadimos una interesante tabla que puede servir de ayuda y que hemos obtenido en Vinetur.
Los tiempos máximos aquí recolectados son recomendaciones aproximadas dentro de los principales tipos de vino y siempre que la conservación del vino en cuestión fuese la óptima. Ante cualquier duda de un vino en concreto lo ideal es buscar mayor información, consejo y distintas experiencias sobre el mismo en base a su variedad en foros especializados o directamente a la bodega.